Piedras del río táctiles Gonge

Caminar descalzo es una experiencia muy placentera ya que nos permite sentir numerosas sensaciones a las que no estamos acostumbrados. Con el paso de los años, se ha ido perdiendo la costumbre de estar descalzos en diferentes ambientes, pero es un ejercicio muy recomendable tanto para mayores como para pequeños.

Entre los numeroso beneficios de andar descalzo podemos encontrar el fortalecimiento de los músculos del pie y del tobillo, la liberación de estrés al estar en contacto con diferentes superficies, la mejora de la motricidad y el desarrollo congnitivo de los niños pequeños entre otros.

Con este juego de piedras de río táctiles podrás recrear las sensaciones de diferentes superficies sin peligros y de una manera rápida y sencilla. Está compuesto por 5 elementos que utilizan materiales como el corcho, el aluminio, la espuma, el caucho TPE y el hormigón para crear una gran variedad de sensaciones. 

En total 5 texturas que permitirán a los más pequeños disfrutar de sensaciones de dureza, aspereza, cambios de temperatura o pegajosidad mientras que la inclinación lateral de las bases exige un esfuerzo extra para superar el recorrido de piedras.