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En muchas ocasiones, nos encontramos con pelotas que no se adaptan a lo que pretendemos por su poca versatilidad en el uso.
Con los balones de grabball, caracterizados por su flexibilidad y ligereza, se nos permite usar un mismo material para múltiples propuestas.
Al ser poco común en el almacén de Educación Física, lo primero que requiere es una familiarización con este tipo de pelotas, y hacer unas primeras actividades para explorar todas las opciones que nos ofrecen, ya que a los balones de grabball no se les puede dar patadas como lo hacemos habitualmente a las pelotas o lanzar y recibir de forma más convencional.
La opción del lanzamiento puede ser múltiple, desde agarrarlo con los dedos a un agarre mucho más técnico como una pelota de baloncesto. Para los alumnos de los cursos más bajos de primaria e infantil es una pelota muy fácil de manejar, ya que el lanzamiento y recepción se puede hacer aplastando la pelota fácilmente o metiendo los dedos entre la malla. Y si queremos que la pelota pese más o bote bien, lo podemos meter dentro de un globo o una pelota hinchable.
Partiendo de estas premisas básicas, todas mis propuestas van a ir en torno a las estrellas, centro de nuestro interés durante todo este curso.
Los alumnos se colocan en pequeños grupos en círculo, excepto uno de ellos que se coloca en el centro con una pica en la mano. El objetivo del juego es que los compañeros pasen la estrella (grabball) de lado a lado del círculo sin que la persona que está en el centro la enganche con la pica. En función de la dificultad con la que queremos que trabajen nuestros alumnos utilizarán picas de diferente longitud. Para que el juego sea dinámico, una consigna clave es que el grabball no se puede mantener más de cinco segundos en las manos y que no se puede pasar a las personas que están más próximas a ambos lados del lanzador. También se puede incluir un desplazamiento de lado al lado del campo para dar un poco más de progresión al ejercicio. Cuando el cazador caza la “estrella” se intercambian los roles.
En esta actividad hay que familiarizarse con el hecho de que la pelota de grabbal lleve dentro un globo inflado para que le dé más peso y sea más fácil el trabajo. Evidentemente si queremos añadir más dificultad al ejercicio basta con no usar los globos dentro de la malla de la pelota.
Por parejas se sitúan uno en frente del otro y simplemente consiste en lanzar la “estrella” hacia el cielo y recogerla sin que caiga al suelo. La idea es o bien conseguir el mayor número de lanzamientos posibles en un minuto sin bote, o retar a los alumnos al lanzamiento más alto, pero que la pelota caiga de nuevo en la manta (para ello podemos usar simplemente un peto o toalla de aseo si la llevan a Educación Física).
Una vez adquirido este dominio básico de mantear las estrellas podemos dividir el terreno de juego en dos campos con una red y podemos hacer una especie minipartido de voley-grabbal dónde el objetivo es pasar la pelota al campo contrario, siempre haciendo un mínimo de tres pases entre las parejas que ocupan el campo.
Los alumnos se disponen en círculo igual que en la primera actividad y el que está en el centro tiene que tratar de coger la estrella. Para los compañeros que están en el círculo exterior, la única consigna es que no pueden retener la pelota, sólo pueden golpearla, bien sea con la mano o con el pie y a la vez intentar que no la coja el compañero del centro. En este caso permitiremos el bote para dar movilidad al balón de grabball y, por ello, además debe llevar el globo dentro para que pueda botar. En todos los juegos planteo meter globos porque es más cómodo si en el mismo juego quieres usar la variante de globos si o globos no. Si utilizásemos pelotas es mas lento andar deshinchándolas en ese momento.
Esta actividad es más para una vuelta a la calma donde vamos bajando las pulsaciones de la práctica. En ella, los alumnos se colocan en círculo sentados con los brazos abiertos y con una distancia mínima entre las manos de uno y otro compañero. La pelota se empieza a golpear de lado a lado del círculo de forma aleatoria con el objetivo de encontrar un hueco entre los compañeros y que salga fuera del círculo.
Si trabajamos con la pelota y el globo, en este caso podemos permitir el desplazamiento con bote, pero es más complejo porque la pelota no tiene ningún control y sale disparada normalmente por encimas de las cabezas de los alumnos. Para dar también un poco más incertidumbre al juego y, si el grupo es numeroso, se pueden meter dos o tres pelotas para que no pierdan la atención sobre el círculo y para que estén mucho más concentrados. Otra variante para el desarrollo sensorial es colgarle un cascabel por dentro al balón grabball, de tal forma que los alumnos con los ojos tapados tendrán que pensar por qué lado viene y cuánto puede tardar. Es un juego que es mucho más fácil hacerlo con el grabball porque el desplazamiento de la bola es siempre mucho más lento.
La experiencia con los balones grabball es muy enriquecedora porque es un material aparentemente muy parecido a una pelota, pero la respuesta de sus movimientos es muy compleja. En general a los alumnos les gusta más con los globos dentro porque permite el bote y es mucho más fácil de manejar, aunque a la vez les vuelve más frágiles porque rompen los globos a veces demasiado rápido.
También lo hemos usado en deportes rutinarios como el hockey, el vóleibol… y da mucho juego, y aquellos niños que dominan estás prácticas tienen un implemento nuevo sobre el que no tienen ningún control y están en las mismas condiciones que los demás ante un deporte que practican habitualmente.
Maestra funcionaria especialista en Eduacación Física y licenciada en pedagogía.
Actualmente desarrollo mi labor docente en una escuela pública de Educación infantil y primaria como especialista de Educación Física en quinto y sexto, actividad que comparto con la labor de jefatura de estudios del centro. Formo parte de un grupo permanente de formación del profesorado en EF con una amplia trayectoria y actualmente formo parte del proyecto de PiEFcitos. Cuento con ponencias y colaboraciones con publicaciones en libros y artículos vinculados a la EF.
Además, divulgo en redes sociales sobre educación bajo el nombre de @SonyHerre